Traición En El Zodiaco
pagina11 tomo 04 , escrito por Javier Solis
El disparo del as de corte láser atraviesa dos cuerpos anaranjados y los demás Trichia Decipiens crecen un poco más , la estructura física de la raza arcana muta .
El disparo del arma de plasma da sobre la anatomía esférica y anaranjada de la extraña raza mítica y rebota por la falta de potencia o quizás podría ser que los seres anaranjados se fortalecieron y enduraron sus anatomías por la perdida de sus iguales .
En las pantallas de la ciudad se ven los rostros de los tres tiradores y de quien intento secuestrar a San , varias imágenes inundan las pantallas en toda la urbe metálica , es una cronología de movimientos de los cuatro criminales , las imágenes demuestran con quienes hablaron y por donde se movieron por callejones y calles , mostrando quien y en donde se les entregaron las armas usadas en el intento de asesinato y rapto , al final de la cronología se ve al comerciante Funginoides haciendo el contrato con el líder de los cuatro criminales , todo esto se mira cuando aun los criminales tratan de huir de la estación espacial Selenopidae , entre calles secundarias y techos de edificios , se mira en la pantalla como una nave ha roto los acoples hidráulicos con la estación espacial y está tratando de huir en dirección del "anillo de impulso" , la nave aunque posee un diseño comercial tiene una gran potencia de desplazamiento y sale rápidamente del sector .
En la pantalla se mira como uno de los tiradores es capturado , con horror se disfruta como las esferas anaranjadas vuelve a crecer , esto es sinónimo que su número está disminuyendo , el tirador capturado es desintegrado con mucha lentitud y quizás como una muestra del porqué esa raza milenaria logro sobrevivir tanto en el gélido espacio.
Otra vez los Trichia Decipiens aumentan su tamaño , se captura otro tirador y también es desintegrado con tal sadismo que hará pensar al siguiente tonto que intente romper las reglas , el infeliz grito de una manera tan horrorosa que daba lástima , el tercer tirador se suicida , perdiendo la cabeza con la ayuda de una hoja de corte de metales en un almacén de la estación espacial .
Al pasar una hora , cuando Joe y San estuvieron a bordo del "Ojos Rojos" aparece en las pantallas de la ciudad la nave fugitiva , al llegar a una bahía se ve como es sacado por la puerta principal de la nave fugitiva al comerciante de piel platinada , un as energético proyectado por las esferas anaranjadas corto el metal del fuselaje de la nave y se remueven varios contenedores , el comerciante hace saber su casta y linaje , en un intento de intimidar a la raza a cargo de la seguridad de la estación espacial .
Aunque es mucho más jugoso para el resto de la tripulación del "Ojos Rojos" como es que San podría ser una matriarca Gluponiana , Joe ha estado al frente de las pantallas del puente de mando de su nave un largo tiempo , al observar como fue llevada la nave y que cuando ya el comerciante ha parado de gritar y tratar de amedrentar , este fue desintegrado miembro por miembro , sistemáticamente torturado y dejado como un ejemplo .
Bartolomé curó el rostro de San y las costillas de Joe , al pasar los días observan la carga que se llevara al sistema solar Theraphosa Blondi .
Pero Joe ha sido consumido todos estos dias por la informacion en aquella unidad de almacenamiento portátil sobre el sistema solar Euríale , admirando como este fue arrasado y mediante un sistema de hologramas y unidades automatizadas se convirtió en una trampa mortal dicho sistema solar , muchos videos muestran que se desea hacer creer que se construye una flota espacial , aun el enorme planetoide artificial que le mencionaron los dos jefes del hampa , Harioti y Lycosa Erythrognatha un tiempo atrás , fue reducido a chatarra espacial , se muestra como un sistema de satélites artificiales controlan la obra teatral espacial que alguien puso en escena , dicho informe se pretende hacer llegar a Sebastian Ophidia o a Esther Ophidia Rodentia a través de las conexiones del mafioso Harioti .
Traición En El Zodiaco
pagina11 tomo 04 , escrito por Javier Solis
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