Oximoron : aunque camine en el valle de muerte
pagina 17 tomo 4 , escrita por Javier Solis
Sobre los esclavos caen los cuerpos acéfalos de enemigos que poseían mochilas de vuelo , frente a los tres esclavos de piel suave aparece un acorazado enemigo que lanza una ráfaga metálica sobre sus enemigos , algunos cohetes dan sobre las orugas metálicas y la torreta sobre la mole mecánica , las manchas verdes fluorescentes carcome el metal , aunque unas gotas del ácido caen sobre el brazo izquierdo de Sylys este no retrocede ante el enemigo , desde el dormitorio principal se pide la extracción de los esclavos favoritos de Publio Elio Adriano , se comprobó la efectividad del entrenamiento nocturno .
Otra vez la esfera dorada desciende sobre la mansión y se mueve a la ventana del dormitorio principal , aunque primero se volvió a presentar el emperador Carl Auer Praseodimio , ya que varios disparos doblaron la cubierta dorada de la esfera de espionaje imperial , se les pide tanto al comerciante como al pretoriano levantarse y seguir girando órdenes a sus subalternos .
-sabes mi apreciado Publio , esos armamentos anti-acorazados aún no se reflejan en el inventario de mí ejército , podría saber su prosedencia ?
No quiere decir que no sean de mi conocimiento , pero me intriga como llegaron a tu posesión ... (emperador)
-su serenísima , los adquirí hace dos años , fue el comerciante Antínoo Bitinio de Aidia quien me los proporciono , fue una venta abierta y muchos postores no vieron su potencial , ya que pocos los adquirieron , por solo tener un rango de precisión de cincuenta metros ... (Neodimio)
-pues aquí tanto Ulpio Trajano Praseodimio como Tiberio Praseodimio admiten lo equivocado que estaban al no adquirir esos misiles con núcleos ácidos ... (emperador)
-es un halago para mí , que tanto el decimotercero Prefecto del Pretorio así como el gran centurión maestro tomaran a bien la utilización de los equipos bélicos que mis protectores portan y agradezco sus palabras hacia mi humilde ser , su serenísima (Neodimio)
La esfera dorada se eleva con dificultad y a una distancia de quizás un kilómetro estalla , la batalla ya ha terminado , aunque muchos de los invasores aún no lo saben , no se tomaran prisioneros aun cuando se rindan , aunque el final de la batalla no lo verían ni Sylys o Kilik ya que estos serian llevados a la enfermería de la mansión de la familia Adriano , así como a unos quince centuriones malheridos y doce muertos , entre los heridos estaría el cocinero Spurius .
Aunque no se encontraría a ningún miembro de la familia Marius entre los muertos , el entrenamiento nocturno no se detendría para Natan o Darad , a la semana se unirían los otros dos esclavos de piel suave .
El pretoriano Sila Félix informaría que el senador Lantadita y su familia estarían escondidos en la ciudad de Karmankan situado en el ecuador del planeta Lantano , que han contratado a todo aquel que pueda empuñar un arma , que se supo del paradero del senador porque el joven pretoriano Tullius Marius pidió su traslado , además se ofrecen arreglos de parte de las familias del senador Cornelius Flavus por conducto directo del rey del planeta Ker , aunque la muerte del senador Sallustius Praseodimio bajo otro contexto hubiera sido castigado por la mano del emperador , la muerte de cualquier miembro de la raza Auerelite en una pugna entre familias no tiene castigo penal o imperial , los esclavos comprenden en su interior porque su amigo no decidió pagar una remuneración por el insulto y seguir con una guerra familiar .
Oximoron : aunque camine en el valle de muerte
pagina 17 tomo 4 , escrita por Javier Solis
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