Oximoron : aunque camine en el valle de muerte
pagina 19 tomo 4 , escrita por Javier Solis
-gracias por tus atenciones Kaeso , pero no me dijiste quien es aquel que su estatua está decapitada ... (Sylys)
-Sigmund Auer Praseodimio es el nombre de ese Auerelite , al inicio poseíamos dos emperadores , uno que regia aquí en el planeta Germánico y otro que deambularía en el sistema solar para siempre mantener la divinidad de los emperadores
Aunque en la mente de los seres pensantes siempre existirá el odio , la envidia y la ira , fue así que tras una cruda escaramuza en el palacio imperial de la ciudad capital M.Antonius el séquito del emperador flotante fue masacrado y se esclavizó a Sigmund Auer Praseodimio , el cual poseía habilidades psíquicas como muchos de esa raza , aunque este tenía mucho control de su poder ...
En que momento del inicio del imperio aquel Auerelite logro escapar , nadie lo sabe , bueno el emperador y su corte si , por eso es que su estatua está acéfala (Kaeso)
Esa noche luego del entrenamiento se relata sobre la potencia y la maniobrabilidad de la nave interestelar de color celeste , mencionando que tiene una capacidad para dos pasajeros y cargar quinientas libras , que se tendría que corregir los sellos para poder salir de la atmosfera del planeta , aunque se menciona el supuesto sistema automatizado antiaéreo de las capas artificiales , además lo que en verdad intriga es lo del segundo emperador y que este aún vive , Sylys Muestra una pequeña estatua de piedra finamente tallada en piedra blanca y se declama en nombre de la divinidad emanada de Ianuarius un bello y cruel poema épico .
Kilik menciona un cargamento de metales preciosos que arribaran al día siguiente , dicho cargamento es una compensación de parte del senador Cornelius Flavus , que aún sigue la guerra entre la familia Adriano y la familia Marius , aunque existen negociaciones de parte del hijo adoptivo del senador Sallustius Praseodimio , con más seriedad Kilik comenta sobre el dato macabro de ese día al relatar como la cabeza del senador Vergilius Hortensius le fue entregado al magnánimo Publio Elio Adriano de Neven , como el mayordomo en jefe Cneo a indemnizado a las familias de los centuriones que perdieron la vida en la batalla en los jardines de la mansión y otros campos de batalla donde se ajustaron cuentas con los aliados de la familia Marius .
Darad relata que se terminó de armar las unidades acorazadas monoplaza que arribaron quince días atrás , el calibre de su artillería y su operatividad , aunque la instalación de los sistemas operativos fueron hechos por Quintus , aunque todas las pruebas se realizaron en la guarnición , sería una sorpresa su desplazamiento en una futura incursión enemiga .
Natan extrae debajo de su litera algunos frutos dulces y los reparte entre sus amigos , comenta que hace algunas horas se dio un enfrentamiento con otro esclavo de nombre Ovidio , quien sentía molestias por el trato preferencial que gozaban los cuatro bípedos de piel suave , que fue el mayordomo Cneo quien evito que llegaran a los puños los dos esclavos .
Ya han pasado quizas seis meses desde que se dio la fuga de los cinco esclavos del establo del delegado imperial Miridio Claudis , la frecuencia y brutalidad de los entrenamientos nocturnos escalo a un nivel casi olímpico por la instrucción ritualista de los veteranos centuriones que llaman hogar a la guarnición debajo de la mansión , una invitación imperial ha sido entregada en manos directas del mayordomo en jefe de la familia Adriano , será algo que no podrá evitar , la piel de Publio Elio Adriano de Neven será pulida y con un soplete se obtendrá un bello color azulado , colocándose finas y diminutas argollas en toda su anatomía , para colocar una constelación de gemas , se injertaran las cápsulas de sangre Azulina en los antebrazos del comerciante beloniano , el dolor es parte de este ritual de belleza , claro que los esclavos de piel suave tiene miedo por su compañero de huida , ya que a este colorido bacanal imperial está invitado el delegado imperial del planeta Phoebus así como el decimotercero Prefecto del Pretorio , estos dos personajes fueron los últimos que vieron a Julius Oppenheimer encadenado .
Oximoron : aunque camine en el valle de muerte
pagina 19 tomo 4 , escrita por Javier Solis
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